jueves, 10 de septiembre de 2020

LEER PARA....


 Leer para aprender sobre curiosidades del reino animal, sobre distintas maneras de contar hechos.

En esta lectura, entre otras cosas hemos descubierto que podemos aprender sobre el ornitorrinco a través de la lectura de un texto narrativo, en lugar de un texto científico.


                            EL ORNITORRINCO

    De verdad: no sé quién soy. Hasta hace poco eso no me preocupaba lo más mínimo. Sabía que era un animal, que mi casa estaba en Australia, la isla más grande del mundo, y que era feliz pescando gusanos, moluscos e insectos que guardo en las bolsas que tengo en las mejillas y que uso como despensa. Es un sistema muy práctico, sobre todo cuando la comida anda escasa.

   De pequeño era tan torpe como todos los de mi familia. Somos más bien lentos para aprender a movernos, a comer solos, a vivir. Por eso entre nosotros no hay genios precoces que hayan escrito una sinfonía a los siete años, como Mozart.

    

Todo iba más o menos bien, hasta que un día llegaron aquellos muchachos.

    -¡Mirad! ¡Un oso!

    Yo estaba hecho una bola y se ve que solo se habían fijado en mi pelo, que es áspero y tupido. Pero así y todo, confundirme con un oso... Me estiré para que salieran de su error.

    -¡Qué va!-dijo uno de los chicos-. Es un pato.

    -¿Un pato?

    -Sí. Tiene pies de pat y pico de pato.

    -¿Y dónde están las plumas?

    -Es cierto -reconoció el anterior-. No tiene plumas. No puede ser un pato.

    -¡Es un gallo! -exclamó otro, muy satisfecho, mirando los espolones que tengo en las patas de atrás y que me sirven para pelear cuando llega la ocasión.

    -¿Y dónde tiene la cresta? Porque los gallos tienen cresta. Y también plumas. No puede ser un gallo.

    -Es un castor -dijo otro, observando mi cola aplanada y peluda.

    -Podría ser -le contestaron-, si no tuviera pico y pies de pato. Pero como los tiene, no es un castor.

    Todos se quedaron callados, mirándose con atención. Y yo cada vez más avergonzado. Al fin uno de ellos dijo pensativo:

    -Entonces si no es un oso, ni un pato, ni un gallo, ni un castor, ¿qué es?

    Nadie contestó. Ni siquiera yo, que estaba hecho un lío igual que ellos. Los muchacho dejaron de mirarme y se tumbaron sobre la hierba. Abrieron una cesta, sacaron pan, queso y fruta, y se pusieron a merendar. Yo me escurrí despacio y me fui a mi cueva. Mi madre, al verme con cara de disgusto, me pregunta´:

    -¿Qué te pasa? ¿Por qué no estás jugando con tus hermanos?

    Pensé que si mis hermanos serían iguales a mí o si yo sría el único que había salido así de raro en la familia. Como no hay espejos donde yo vivo y nunca me han hecho una fotografía... Entonces le pregunté a mi madre:

    -¿Qué son mis hermanos?

    Ella me puso la pata en la frente para ver si tenía fiebre.

    -¡Ay, hijo! -exclamó inquieta-. Te has debido de dar un atracón de mejillones.

    -No, mamá. Solo quiero saber quién soy. Quiénes somos.

    -Ornitorrincos -dijo ella, apunto de llorar porque un hijo se le había vuelto loco.

    -¿No somos ni osos ni patos ni gallos ni castores?

    -¡Claro que no! ¡Qué ocurrencia!

    -Entonces, ¿por qué nos confunden?

    -Porque nos parecemos a ellos en algo..., pero hazme caso y no te preocupes. Ya te he dicho: somos ornitorrincos.

    -¿Y por qué al canguro se le ve que es un canguro en seguida, y al caballo, y a los pájaros y en cambio con nosotros la gente se hace un lío?

    -¡Ay, hijo! Porque la gente no es tan lista como cree. Anda, cómete esta rica mosca y deja de pensar tonterías.

    Mi madre se sacó la mosca de la bolsa de provisiones, esa que tenemos en la cara, y me la ofreció con una dulce sonrisa. Una sonrisa de madre ornitorrinco, que es de las más bonitas que hay. Y ya más tranquilo salí en busca de mis hermanos.

    Aquel día y los que siguieron no me volvía a acordar de los muchachos ni de su conversación. Pero todavía, de vez en cuando, me pregunto quién soy y repito para no olvidarlo:"ornitorrinco, ornitorrinco, ornitorrinco...", hasta quedarme dormido.

     Carmen Vázquez-Vigo Animales charlatanes. Noguer (Adaptación) 21 fichas de comprensión lectora


También hemos reflexionado sobre la importancia de reconocerse a uno mismo, de la pertenencia a un grupo...

1 comentario:

  1. Luz manda el siguiente resumen:
    El ornitorrinco viven en Australia, es carnívoro y es uno de los poquísimos mamíferos que pone huevos. De jóvenes tienen dientes, pero los pierden de adultos. El ornitorrinco es mamífero, pero las hembras carecen de mamas. Las crías lamen la leche que maman de unas glándulas situadas en su abdomen y una de sus cualidades es q tienen un espolon y tienen un pico como de pato

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